Uno de los primeros mexicanos que abrió sus puertas en la capital fue Tepic, quienes después de casi una década en Chueca, se han cambiado de barrio y han abierto su nuevo establecimiento en el Barrio de Salamanca. Claramente el antiguo local se les quedaba pequeño, ya que han ido ganando mucha fama entre la sociedad madrileña.
Este cambio de ubicación lo han usado para conseguir un espacio más grande, que han decorado de forma moderna y minimalista. El local dispone de dos espacios:
- La parte superior con mesas altas y una barra de azulejos y cerámica ideal para ir a picar unos totopos y unas margaritas después del trabajo un día entre semana.
- La parte de abajo cuenta con mesas bajas de madera, espejos, lamparas con bombillas edison y tonos blancos, ideal para ir a comer en familia, pero ojo porque los fines de semana suele estar hasta la bandera y suele haber mucho follón.
En la carta encontraréis una cocina mexicana alejada de los estereotipos pero sin olvidar los sabores clásicos. Empezamos picando guacamole con totopos, un clásico que nunca falla. Nos quedamos cortos de nachos y nos trajeron más. Un detalle que nos gustó porque la ración era realmente ridícula para todos los que éramos. Y el actor del plato, el guacamole, estaba bueno.
Continuamos con unas quesadillas de Huitlacoche, que a los que no habían probado este hongo (huitlacoche) antes les sorprendió, pero a mi me pareció un plato muy sin más. Decente pero no para recomendarlo o volverlo a pedir. Aún no sé que, pero le faltaba algo que lo alegrase un poco.
La camarera nos recomendó probar el ceviche de pescado a la mexicana, porque estaba convirtiéndose en el plato revelación de la carta. Pargo macerado en lima y acompañado de tomate, cebolla morada y leche de tigre. Cítrico, fresco y de ración abundante. Un plato que gustó más a las chicas, que a los chicos :).
Pedimos varias raciones del plato estrella de la casa: los tacos al pastor. La base de este taco es una rica carne de cerdo adobada que preparan como si fuera un kebab y luego la sirven con cilantro, cebolla y piña para que cada uno se haga su taco al gusto. Auténticos, parecía que los estábamos comiendo en algún local del mismísimo México.
Otro obligatorio de la carta son los tacos de cochinita pibil. Se puede elegir el tipo de tortilla: maíz o trigo. Y la verdad es que nosotros probamos las dos, creo que prefiero la de maíz porque tiene una consistencia más firme y así no se te resbala el relleno de los tacos. Un buen guiso de carne rematado con cebolla encurtida, sencillo pero super sabroso.
Y para cerrar la comida nos trajeron un par de platos de tacos de alambre de ternera con queso. El mejor plato de la cena. Mucho queso fundido, carne a la parrilla, pimientos verdes y frijoles negros. No hacía falta tortilla, estaba tan rico que los más rápidos nos lo comimos a cucharadas ;).
Y para acabar unas ricas margaritas, tanto clásicas como frozen, porque no somos muy fans de los crepes de cajeta y los buñuelos mexicanos no nos llamaban nada la atención, así que nos dimos a la bebida para amenizar la velada a la mexicana.
Mi recomendación: si este verano os quedáis en la calurosa Madrid y la terraza de Salón Cascabel en el Gourmet de Serrano está hasta la bandera…una opción si queréis hacer un afterwoork mexicano es ir a tomar margaritas y nachos a la barra de Tepic, pero es algo subida de precio. Cenar sale por 30 euros/persona y las cantidades nos parecieron algo escasas comparadas con las que ponen en otros mexicanos (como La Lupita, El Jalapeño, La Chelinda…).
Tepic
Calle Ayala 14, Madrid
915 22 08 50
Un comentario en “Tepic”