El chef gaditano Angel León, también conocido como «el chef del mar«, abrió hace un año La Taberna del Chef del Mar, una taberna algo más sofisticada que las que hay por la zona y nosotros fuimos de peregrinación a probar sus bocados marinos hace unos días.

La Taberna del Chef del Mar es un oasis marinero en pleno centro del Puerto de Santa María
En el establecimiento en el que se cocinaron 2 estrellas Michelín, ya que fue la primera ubicación de Aponiente, ahora este maestro con la ayuda de Marta Girón, han creado un local con ambiente marinero donde se sirven platos con insignia de la casa y donde hay que venir a pasárselo bien.

Antes de entrar en cocina nos recuerdan que «en esta casa se cocinaron dos estrellas Michelín»
El local está decorado con motivos marineros en cada esquina (lámparas marineras, peces volando por la sala…) y coloridas cajas de poliexpán, típicas de las lonjas de pescado, en el techo. La acústica es malucha y como la gente viene a divertirse, si te tomas una manzanilla de más…vas a tener complicado seguir la conversación del de al lado 🙂

Me gustaron mucho las coloridas cajas de poliexpán que inundan el techo de la Taberna del Chef del Mar
En la carta encontraréis tapas y raciones, como en todas las tabernas del sur, pero algo más sofisticadas y muy llamativas. Para los que os guste probar un poco de todo, es un buen sitio para ir en grupo y así poder picar más cosas.
Nosotros empezamos con la ensaladilla clásica con virutas de maruca. Una rica y ligera ensaladilla rusa, que no tiene nada que ver con las que estamos acostumbrados a comer por ahí. Creemos que el truco está en machacar las patatas con la mayonesa. Además de usar atún de la zona 😉

Ensaladilla clásica con virutas de maruca
Seguimos con el atún rojo hecho tartar. Habíamos cenado la noche anterior en El Campero de Zahara de los Atunes, donde pedimos el tartar de toro y coincidimos todos en que este tartar estaba mucho más bueno. No sabemos si es por el regusto a cebollino y perejil que se te queda en la boca al tomarlo o por el propio atún, pero este estaba bueno bueno.

Tartar de atún
Luego nos trajeron las brochetas de pulpo en salsa anticuchera, qué fue el bocado qué más gusto. Una hoja de lechuga escondía unos trocitos de pulpo a la brasa -muy bien cocinados- y cubiertos de pepinillo encurtido y de una cebollita roja encurtida en cocina con jengibre y lima, de echar lagrimita. El toque de gracia lo ponía una mayonesa de ají, con la que consiguen un picante riquísimo que culmina el plato.

Brochetas de pulpo en salsa anticuchera
Pasamos a los platos calientes y el primero en llegar fue la ración de huevos rotos con camarones frito y papada ibérica. Pocos saben freír tan bien como los gaditanos, ¡¡¡qué arte tienen!!! Los camarones están fritos a la perfección. Los huevos y la papada les acompañaban.

Huevos rotos con camarones frito y papada ibérica
No faltó el arroz meloso de planctón marino, que cambió la cara de más de uno al llegar a la mesa por su color verde oscuro y su fuerte olor a algas. Yo tuve la suerte de probar este plato en un curso de cocina que impartió Angel León en Kitchen Club hace un par de años y me encantó volver a tomarlo. Largo sabor marino en boca del plancton y un arroz super meloso. Fascinante.

Arroz con plancton
Y terminamos con las castañuelas guisadas con parmentier. Para mi, otro platazo del chef del mar. Oloroso, lima, jengibre y cebollino iban apareciendo en boca a medida que saboreabas este guiso de sepia y patatas. Diría que obligatorio para todos los que vengáis a este templo marinero.

Castañuelas guisadas con parmentier.
De postre probamos los tres, el melón refrescante con hierbabuena y fino. Maceran el melón en fino, para que se impregne del alcohol y luego le dan el toque refrescante con la hierbabuena. Nos supo a mojito. Fue el postre más flojito de los tres.

Melón refrescante con hierbabuena y fino
El que tenéis que pedir sí o sí es el cremoso de chocolate con avellanas, crujiente de aceite de oliva y sal. Es algo PROHIBITIVO. A mi me pareció que estaba buenísimo. Una delicada mousse de chocolate, un crujiente de aceite y sal que daba textura y sacaba las notas del chocolate que me pierden y la avellana, que me parece la mejor compañera de batalla para el chocolate 🙂
Y la leche con galletas, estaba muy conseguida. Te recomiendan tomarlo de abajo a arriba para probar todo: las galletas, la crema y la espuma de leche. Me pareció demasiado empalagosa y creo que es por la leche condensada. Sin embargo, mi tía Paloma estaba feliz, le pareció el mejor postre y se la terminó en un abrir y cerrar de ojos.

Leche con galletas
Mi recomendación: si estáis por el Puerto de Santa María, habéis tomado demasiado pedacito frito y os apetece probar las tapas de un artista, os recomiendo sentaros en uno de los taburetes de la sala y dejar que os saquen los platos estrella. Cenar sale por 25 euros/persona comiendo buena cantidad y bebiendo rica manzanilla de la zona 😉
La Taberna del Chef del Mar
Calle Puerto Escondido 6, El Puerto de Sta María