Tras nuestra #JapanAdventure, descubrimos que en Japón sólo comen nigiris y sashimi y los makis que comemos aquí en España apenas se ven, por lo que cuando volvimos a casa después de las vacaciones teníamos mono de comida japo :). Entre paseo y paseo por el Barrio de Salamanca descubrí Kokoro, un japo con pinta de izakaya (taberna japonesa) que llamó mi atención y tuve que informarme un poco de la calidad que tenía antes de incitar a Luis para ir a probarlo ;).

Kokoro

El maestro Koji Otani dirige este sencillo local, en donde encontraréis una carta muy tradicional y no demasiado extensa (cosa buena porque muchas veces los restaurantes pecan en este aspecto) pero con suficiente variedad para poder ir un par de días y comer cosas diferentes :).

Foto tomada de 11870 del maestro Koji Otani

Aunque hayamos estado en Japón, la pasión por los tempurizados de Luis sigue siendo enorme y son siempre su primera opción. Tienen un roll de anguila con salsa teriyaki tempurizado, ¡¡¡qué es realmente rico 🙂 !!!

Maki  tempurizado de anguila con salsa teriyaki

Un maki roll de langostino tempurizado con mayonesa japonesa, que nos recomendó la camarera y fue todo un acierto, ya que aunque sólo vengan 4 piezas, son bastante consistentes y te llenan mucho ;).

Maki de langostino tempurizado

Siempre solemos pedir un maki clásico por si nos equivocamos en los demás, para cubrirnos las espaldas ;). Esta vez nos decantamos por un california roll hecho a la inversa, ya que el salmón estaba puesto como si fuera un nigiri y en el interior encontrabas aguacate y queso crema. Con un tamaño perfecto, un pescado fresco y un arroz bien hecho, nos pareció una pieza de sushi muy buena.

California roll invertido

Mi recomendación: es un buen japo de barrio, en el que por un precio muy decente te sirven un pescado fresco, en un roll bien hecho y con un servicio atento y cuidadoso :). Cenar sale por 20 euros/persona tomando sólo makis roll y con bebida.

Kokoro

Calle Don Ramón de la Cruz 72, Madrid