Me encanta ir a un restaurante, que el camarero te recomiende una cena espectacular y disfrutar de ella como dios manda, eso fue lo que pasa cuando vas al «Mercato Ballaró».

Normalmente no solemos ir a cenar a italianos, porque no sientes que estás en Italia disfrutando de un buen plato de pasta, una buena pizza, o unos buenos antipastis, como puede pasar en otros restaurantes, pero nos había hablado nuestro amigo Flojendio de este restaurante y decidimos ir a probar suerte.

Planta baja

Reservamos mesa en la parte de la barra, donde se pueden pedir medias raciones o platos de la carta como en el restaurante de la planta de arriba. Nosotros nos decidimos por medias raciones para poder probar más platos y todo lo que llegó a la mesa fue espectacular.

De entrantes compartimos: vitello tonnato (redondo de ternera con salsa de atún, anchoas y alcaparras), caponata siciliana (un guiso de berenjenas con albahaca y salsa de tomate, que parecía que lo había cocinado la Mamma siciliana :)) e involtini di melenzane (rollitos de calabacín y berenjena rellenos de queso y con una salsa de tomate, que me obligó a coger un trozo de pan para rebañar el plato de lo rica que estaba).

Involtini di melenzane

Todos felices de saber que el sitio que habíamos elegido era bueno, estábamos ansiosos por probar los platos principales: fettuccini funghi (un tipo de pasta con setas y vino blanco), malloreddus al cinghiale (son los pequeños ñoquis de Cerdeña, que aquí te los sirven con un ragút de ciervo y queso de cabra, yo pedí que no me pusieran queso de cabra y le añadí parmesano).

Malloreddus al cinghiale

Los zikrofy son una pasta rellena de patata y bacon con forma de caramelo, hecha con una salsa de salvia y algo dulce que estaba espectacular, sobre todo nos gustó la originalidad del plato y su sabor tan diferente.

Zikrofy

La lasaña de carne hecha a base de ternera y cerdo, con poca bechamel, mucho queso y su famosa salsa de tomate…un plato que se lo recomiendo a alguien que vaya con mucha hambre, es contundente y delicioso.

Lasaña

Y los fusilli a la Norma, maravillosas espirales aliñadas con una salsa de cuatro tomates, berenjenas cortadas en trozos grandes y requesón…QUÉ plato, una magnífica elección para aquellos que estén en operación biquini y no se quieran privar de un buen plato de pasta.

Fusilli alla Norma

La verdad es que disfrutamos muchísimo, el trato era impecable, la comida deliciosa y el ambiente, toda una mezcla para pedir un postre. He de reconocer que nos equivocamos en este último paso, deberíamos haber pedido el cannollo, que era el postre favorito Tony Soprano, pero no lo hicimos y pedimos tarta de chocolate que no era nada del otro mundo. Ya hemos aprendido para la próxima vez 😉

Mi recomendación: si tienes antojo de auténtica comida italiana y no te quieres gastar una barbaridad de dinero, esta es una muy buena opción porque por 17€ cenas 2 platos+postre+bebida y la casa te invita a un limoncello. Para mi calidad/precio inmejorable y aunque no he comido en la planta de arriba, os recomiendo la parte de abajo y así podréis probar más cosas.

Mercato Ballaró

C/ Santa Engracia 24, Madrid