Cuando vamos a un nuevo sitio nos encanta conocer su historia y poder compartirla con vosotros. Hoy os vamos a hablar del Bar Lambuzo, una abacería que abrió sus puertas a principios de este año y está dirigida por la familia Moreno Garcia al completo:

• los padres, Pepe Moreno y Mª José García, son los dirigentes de todo
• Luis es el encargado de que funcione el salón
• Diego está en los fogones con su madre
• Ignacia es la repostera
• María es la encargada de que el Bar Lambuzo se mueva en las redes y salga en los medios

Nada más entrar, en una de las paredes de la barra, se puede leer «Lambuzo: dícese de la persona que gusta de probar todo lo que le pongan por delante…esté en su plato o en el del acompañante»…no sabíamos que eramos unos lambuzos hasta que vinimos hace un par de semanas 😉

La idea con la que se abrió el Bar Lambuzo fue traer un trozo de Andalucia a Madrid, para poder tomar tapas gaditanas de toda la vida usando materia prima mayoritariamente andaluza y a precios muy competitivos :)…y en menos de un año han conseguido hacerse un nombre y crear un ambiente súper apetecible cualquier día de la semana.

Nosotros probamos muchas de las tapas que tienen, empezando por unas papas aliñadas con caballa de Tarifa, que me recordaron a mis veranos en Sanlucar de Barrameda, mi padre siempre pedía esta tapa allá donde íbamos 😉

Nos gustó tanto el salmorejo que pedimos dos…aunque apenas lo pude probar porque Luis se agarró al vaso y se hubiera tomado litros y litros. Lo suelen poner con melva canutera, pero nosotros lo pedimos sin.

No podía faltar en la mesa una tapa de ensaladilla de atún de Barbate, a la que le hubiera echado un poco más de patata…por sacarle algún fallito a la tapa, porque estaba muy sabrosa la verdad 🙂

Leer croquetas de gambas al ajillo y de tortillitas de camarones no suele ser normal en ninguna taberna o bar de Madrid, así que los ojos se nos pusieron como platos al verlo. Nos impresionaron mucho las de tortillitas de camarones, ¡¡¡no os las perdáis cuando vayáis, hacednos caso!!!

Mucho nos gusta el pescaito frito y en el Bar Lambuzo preparan unos cucuruchos de choco frito, con una fritura muy ligera y poco grasienta, que sienta de maravilla si lo acompañas de una manzanilla bien fresquita 😉

Otro cucurucho que hay que pedirse es el de adobo gaditano, me supo a gloria cada bocadito que tomé.

Y siguiendo las recomendaciones de la casa nos pedimos una tapita de queso Pajarete de Villamartín y otra de salchichón ibérico de Prado del Rey, que nos parecieron unos productos de primera calidad.

La gran sorpresa llegó al final de la velada…pedimos la tarta de queso, porque vimos que la mesa de al lado la ponía por las nubes e incluso llegó a pedir la receta a Pepe. Sólo diré que nosotros también repetimos y que hasta el momento es «la mejor tarta de queso» que hemos probado en Madrid 🙂

Mi recomendación: si os apetece picotear algo con los amigos en un lugar único y muy auténtico, vuestro lugar es Bar Lambuzo, un pedacito de la Sierra de Cádiz en pleno centro de Madrid. Cenar sale por 15 euros/persona forrándote a tapas (a 3,5 euros cada una) y bebiendo unos cuantos vinos gaditanos 🙂

Bar Lambuzo

Calle de las Conchas 9, Madrid