En el número 13 de la bulliciosa y étnica calle San Bernardino, nos encontramos con el restaurante TreZe, un pequeño local dirigido por el joven chef Saúl Sanz, quien aprendió de César Martín en Balzac y hace tres años decidió montar un proyecto muy personal junto con su mujer, Elena Ursu, quien se encarga de poner el punto dulce a las comidas ;).
En una carta en la que se trabaja mucho los productos de temporada, llama la atención la cantidad de platos con carne de caza que podemos encontrar: ciervo, liebre, perdiz, conejo, gamo, jabalí, paloma…pero también encontramos platos tradicionales como unas croquetas, un par de platos de pescado.
Nosotros nos decantamos por los platos estrella de la casa como la coca de ciervo con cebolla asada y hojas, que nos dejó sin palabras…una coca muy bien hecha (bien estirada, crujiente y doradita) con unas finas lonchas de carne de ciervo asada y unas tiras de cebolla que estaban dulces y muy suaves, haciendo de este plato un bocado único y obligatorio de pedir :).
El huevo a baja temperatura con setas de temporada y aromas es un espectáculo desde que llega a la mesa hasta que te lo comes. Consiguen encerrar el aroma del ahumado…es lo primero que se huele cuando llega el plato a la mesa y en paladar no para de apreciarse…¡¡¡buenísimo ;)!!!
De segundo, Saúl nos aconsejó pedir la pluma de ibérico al sarmiento, mazorquita de maíz y salsa barbacoa. Un plato dónde volvemos a encontrar el fuerte sabor del ahumado, en este caso procedentes de los sarmientos sobre los que se hace la pluma ibérica. La salsa barbacoa no es tan espesa como la que se comercializa pero tiene un sabor dulzón muy bueno :).
Y el gamo asado con setas, castañas y membrillo. Nunca había tomado gamo antes y me asombro por varias razones: es una carne con un sabor parecido al del buey, debe ser un animal bastante grande porque es una ración de las que recuerdas y con la guarnición que escogió Saúl demuestra como sabe tratar el producto y combinarlo para impresionar al comensal ;).
En TreZe los postres son especiales, Elena es una gran repostera que sabe poner el broche de oro a una señora comida ;). Los postres los eligieron en cocina, nos dejamos guiar por los expertos y acertaron de pleno, trajeron para que probásemos la Crème Brûle caramelizada con helado de tomillo limonero, en la que el dulzor de la crema contrastaba con el regusto ácido del helado…creando una fiesta en la boca con cada cucharada.
Y el bizcocho de chocolate blanco con cremoso de violeta y sorbete de frambuesa. Impresionante el juego de texturas de este postre, un bizcocho esponjoso que va como anillo al dedo con el cremoso de violeta (que hacen como si fuese un flan con chocolate blanco y caramelos de violeta), el gélido helado y las frambuesas liofilizadas que encuentras a medida que vas comiendo :).
Mi recomendación: me gusta la filosofía que defienden en TreZe «Bienvenido a la mezcla de sabores de calidad, estilo y trato» porque es lo que ofrecen realmente. Un lugar especial, donde ir a celebrar y degustar cocina tradicional renovada por un precio muy asequible. Cenar sale por 35 euros/persona tomando una media ración de primero, un segundo, un postre para compartir y una copita de vino :).
TreZe
Calle del General Pardiñas 36, Madrid
915 41 07 17