El martes, 14 de agosto, empezaron mis vacaciones y nos vinimos a Palma de Mallorca a celebrar la boda de Sophie y Lucio. El sitio escogido para la «pedida de mano» fue el Harbour Grill en el recién inaugurado Port Adriano (6 de marzo del 2012), un puerto deportivo diseñado por el francés, Philippe Stark.
El restaurante elegido era la Meca de los carnívoros, ya que en la carta se pueden encontrar diferentes cortes de carne y de tamaños muy considerables. El rib eye de 300g al estilo alemán o entrecot de 250g al estilo argentino, eran los más deseados por la clientela, según comentó el camarero. Así que nosotros fuimos obedientes y pedimos 3 rib eyes poco hechos y un entrecot. Menudos trozos de carne, se deshacían en la boca nada más meterlos y el sabor a brasas se hacia notar en cada mordisco.
De guarnición pedimos: pimientos de padrón, setas portobello y patatas fritas. Todos pegaban de maravilla con la carne.
No podían faltar unos buenos postres, los elegidos fueron una deliciosa tarta de manzana con helado de vainilla y toques de canela, que venía presentada en una cazuela y tenía un hojaldre buenísimo (perfectas capas de mantequilla y fina masa azucarada).
Y un tiramisú malísimo que sabía a medicina y nos arrepentimos muchísimo de pedirlo porque había muchos otros postres que queríamos probar, una pena :(.
Mi recomendación: merece la pena ir a conocer este nuevo puerto en Calviá, donde se unen el lujo con el confort para crear un espacio especial, con mucho encanto e idóneo para ir a ver una puesta de sol en familia o con vuestra pareja ;).
Harbour Grill
Urbanización El Toro s/n, Palma de Mallorca
Piquillos o Padrón? Estos últimos, algunas veces pican y otras, «non».
Eran de padrón, tengo que corregirlo 😉
Fabuloso! Otro lugar, donde pasamos una noche magica, en mi pedida de mano! Gracias Anita en recordar este momento tan especial!
Estas 2semanas en Mallorca han sido tan especiales para mi que no podía no nombrar todos los magníficos sitios a los que nos habéis llevado!!Gracias a vosotros 🙂
bad quality and lousy service, as we entered the «entrance» a guy with a stinky cigar said hello to us. imagine that.
i think you were not lucky, because the service was amazing and the quality of the meat perfect. We had dinner in the terrace and a german waiter took us to our table with a smile on his face 😉