El viernes tuve la suerte de que en mi trabajo me dieran dos entradas VIP para el máster de tenis donde pude ver mi primer partido de tenis en vivo. Además, tuve el privilegio de ver a Nadal durante su entrenamiento y comer en la zona VIP.

La comida corre a cargo del catering austriaco Do&Co, que ha conquistado mi estómago después de las delicias que pudimos degustar el viernes.

La zona VIP, estaba formada por una zona al aire libre, donde se tomaban copas y había puestos de zumos, helados, puros, tapas… y una zona de interior, donde se situaba el restaurante, que estaba formado por dos plantas de varias salas cada una. En cada sala había comida de una parte del mundo (española, japonesa, italiana, china, india, americana, inglesa, tailandesa, francesa…) nosotros fuimos probando de todo un poco.

Como buenos españoles, comenzamos la comida con un poquito de jamón y unas croquetas, para ir abriendo el apetito.

Nuestra pasión por el sushi y la comida japonesa es tanta que cuando vimos esta zona no pudimos resistirnos a coger un plato para probar.

La zona italiana olía de maravilla, había todo tipo de pasta con diferentes salsas para acompañarla, nosotros nos decantamos por estos rigatoni a la norma con parmesano recién rallado, que estaban…de muerte 🙂

Yo estaba en una nube, la sonrisa no me desapareció de la cara en ningún momento, quería probar un poquito de cada cosa y nuestra siguiente elección fue un tartar de berenjenas y aguacate acompañado de pollo a las finas hierbas. Este plato fue, sin duda, el mejor de toda la comida.

Antes de empezar con los postres pedimos este solomillo para compartir porque tenía una pinta que decía: «COMEDME» y eso tuvimos que hacer ;).

El broche de oro, lo pusieron los postres. Para los golosos, éste hubiera sido vuestro paraíso, había de todo: mini tartaletas de frutas del bosque, mousse de chocolate, macaron, bombas de chocolate y avellanas, fruta variada con nata o con chocolate, coulant de chocolate, crema catalana, tartas variadas, y crepes y gofres recién hecho.

La verdad, es que fue una experiencia inolvidable, como buena foodie disfruté al máximo cada minuto, observé a cada cocinero preparar su especialidad, aproveché cada bocado y me alegró ver que la comida une a la gente y les hace compartir momentos felices.

 La Caja Mágica

C/ Camino de Perales, s/n (Madrid Sur)
Parque Lineal del Manzanares, barrio de San Fermín.